Los problemas que observo tienen que ver, creo, con dos cosas.
Que hay varios jugadores claves que llegan mal: Torres, sobre todo, Iniesta y Cesc. Y a ver cómo anda el más importante de todos, Xavi, que n olas tengo yo todas conmigo. Súmese a ello una baja muy importante: Senna, que fue clave en la Eurocopa, por su excelente trabajo defensivo y su magnífica salida de balón. No hay nadie a su altura en ese puesto tan importante.
Que Del Bosque me da la impresión de tener muchas dudas. Me parece que, a día de hoy, aún no sabe cómo va a jugar. Ha metido un poco la mano en lo que dejó Luis, como era inevitable, pero no lo veo yo que sepa muy bien hacia dónde quiere ir, porque sus iniciales intentos de cambio no le salieron demasiado bien, y continuamente oscila entre un 4-1-4-1, un 4-4-2, un 4-2-3-1...
No creo que haya que ser pesimistas de mano, siguiendo nuestra inveterada línea depresiva, pero entre ello y ese optimismo desbordado, al servicio de la creación de audiencias, que impera en los medios, me parece que está el justo término medio de una expectativa ilusionada pero con muchas cautelas. Veremos cómo llegamos a octavos y contra quién nos enfrentamos en ellos.